Durante nuestros procesos de fabricación realizamos estrictos controles de temperatura, PH, viscosidad, brix, detección de impurezas, riesgos, puntos críticos, entre otros que nos permiten obtener un producto final de calidad.

Mantenemos una estricta ejecución de los manuales de procedimientos HACCP, BPM y SSOPs para garantizar la calidad e inocuidad establecida en el codex alimentario internacional.

Conscientes de nuestra responsabilidad con el medio ambiente, desarrollamos un plan de “Gestión Ambiental y Participación Empresarial por una producción Más Limpia” que nos permite utilizar 100% de la materia prima. Un ejemplo de esto es que logramos obtener un valor calórico 40% por encima de la leña, utilizando la cáscara del coco para atizar el fuego de las calderas en donde aplica el proceso de cocción de los concentrados.

Mantenemos relaciones sólidas con los productores locales porque valoramos la frescura, la sostenibilidad y priorizamos el apoyo a nuestra comunidad.

Creemos que la calidad comienza en la fuente. Por eso, al comprar directamente a los productores locales, garantizamos que nuestros ingredientes lleguen a nuestras instalaciones en su punto máximo de frescura. Cada elemento es seleccionado con cuidado y amor.

Al elegir ingredientes locales, contribuimos al crecimiento económico de nuestra región. Estamos orgullosos de ser parte de una cadena de suministro que beneficia a nuestros vecinos y amigos.

Reducimos nuestra huella de carbono al minimizar las importaciones de larga distancia. Al apoyar a los productores cercanos, también fomentamos prácticas agrícolas más sostenibles.

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